El Baúl de Xandris

  Muchas de las novelas que leo últimamente tienen como protagonistas a las mujeres y la vida que tuvieron que llevar en la posguerra española sometidas a su padre o a su marido. En algunos casos, en los que pertenecían a la burguesía, las mujeres pudieron tener algún tipo de estudios, pero en las clases medias y pobres les estaba vedado pues sus únicos destinos eran o ser monjas o ser esposas, destinos que compartían con las que estudiaban. Cuando alguna se salía de la línea indicada eran señaladas como pérdidas. La búsqueda de libertad de las mujeres que osaban salir de los límites marcadas con el tiempo ha quedado totalmente olvidada y las vidas de esas mujeres borrada de la historia. Con esta novela se pretende dar voz a muchas mujeres anónimas, borradas por la historia, y desde luego alcanza su objetivo. Se narra con buena prosa la vida de dos mujeres, Lara y Maixabel, unidas en el tiempo por la casa que habitan y en la que esta última falleció y fue encontrada momificada diez año

  En esta ocasión os traigo un clásico que recuerda los cuentos de hadas, por ejemplo, cuando la bruja aparece en el banquete de boda y maldice a la novia me lleva a recordar la aparición de Maléfica en la Bella Durmiente. Fue publicado por primera vez en 1808 y posteriormente 34 años después, cuando ya había aparecido Frankenstein que fue un motor de cambio en la Literatura del momento. Esta edición es la primera publicación de esta obra en castellano. Es un claro ejemplo de la novela gótica y el primero en el que la bruja se considera la principal protagonista. El resto de los personajes, el barón malvado, su esposa bondadosa, los niños, en peligro, demonios, un monje, la bruja y una mujer malvada, forman un cuadro gótico apetecible. la descripción de la bruja, su morada y los animales que las acompañan son el arquetipo que de la misma se tenía en el siglo XIX . La trama, aunque sencilla y un poco previsible para el lector actual, tiene un encanto que te hace pasar las páginas, ayuda

Cuando vi esta novela lo primero que recordé fue una película de cuando era muy joven y solo veía el cine de la TVE,  la Pimpinela Escarlata (1934), interpretada por Leslie Howard, el Ashley Wilkes de Lo que el viento se llevó , mi película favorita de todos los tiempos. Recuerdo que después localicé la novela del mismo título escrita por la Baronesa de Orczy en 1908. Sin ser un actor que me guste mucho la historia de una persona que lleva doble vida me encantó, y ese fue el motivo de que buscará la novela en que estaba basada. Y, años después, ahora mismo, descubro, gracias a Roca Editorial que ha tenido la amabilidad de enviármela que se han basado en aquella novela y en aquel personaje para crear una nueva, por lo que la verdad es que su lectura no se ha hecho esperar. Evidentemente, la novela que ahora reseño no se basa en el personaje original, cuya historia transcurría durante la Revolución Francesa entre Londres y Francia mientras que la en la presente los protagonistas recorren

Una novela que me ha sorprendido positivamente. El autor nos relata las vivencias de un personaje, Eduardo, que nos recuerda al Dr. Jeckyll y Mr. Hyde, dos personalidades en conflicto y en el mismo ser y su viaje a los infiernos. Esta novela escrita con una prosa muy cuidada  nos plantea una lucha interna entre lo que somos y lo que querríamos ser y lo que esperan de nosotros, es un viaje a la jungla del yo que ocultamos pero también es la búsqueda de relaciones sociales que nos sanas, pues el hombre es un ser social que interactúa con otros seres. Realmente en una novela con tintes filosóficos acerca de la vida, las relaciones, el amor, el cuidado hacia los otros, las normas sociales y la transgresión de las mismas, la culpa. Hay personajes, aparte del protagonista, muy ricos como, por ejemplo,  Virginia o, el compañero de trabajo de Eduardo, Paulino. Sin embargo, el protagonista que más destaca es el lenguaje, culto y literario, con infinidad de referencias literarias que son un auté